2025

Alimentos Inflamatorios
NUTRICIÓN Y SALUD

ALIMENTOS
INFLAMATORIOS

Evidencia, mecanismos y consideraciones prácticas

2025 MTRA. ODETTE MONSERRAT SAHAGÚN ANGUIANO Nutrición

Alimentos inflamatorios: evidencia, mecanismos y consideraciones prácticas

Escrito por: Mtra. Odette Monserrat Sahagún Anguiano

La inflamación es una respuesta biológica compleja que, cuando es crónica o desregulada, se asocia a numerosas patologías crónicas como enfermedad cardiovascular, diabetes, obesidad y ciertas neoplasias. Diversos alimentos y patrones dietéticos pueden modular la respuesta inflamatoria a través de vías metabólicas, mediadores inmunitarios y cambios en la microbiota intestinal. Este artículo revisa la evidencia actual sobre alimentos y componentes dietéticos inflamatorios, sus mecanismos propuestos y las implicaciones para la alimentación clínica y la salud pública.

Introducción

  • La inflamación aguda es una respuesta protectora, pero la inflamación de bajo grado crónica se ha asociado a múltiples enfermedades.
  • Factores dietéticos pueden influir en la inflamación a través de:
    • Índice glicémico y carga glucémica.
    • Perfil de ácidos grasos (por ejemplo, omega-3 vs omega-6).
    • Antioxidantes y fitoquímicos.
    • Proteínas y azúcares añadidos.
    • Componente microbiota y permeabilidad intestinal.
  • Objetivo: sintetizar la evidencia sobre alimentos inflamatorios, discutir mecanismos y proponer consideraciones prácticas.

Mecanismos biológicos relevantes

  • Vía de prostaglandinas y eicosanoides: ácidos grasos diferentes producen mediadores inflamatorios (PGE2, LTC4, etc.).
  • Respuesta de citoquinas: IL-6, TNF-α, CRP como marcadores de inflamación sistémica.
  • Estrés metabólico: hiperglucemia y resistencia a la insulina pueden activar rutas inflamatorias.
  • Microbiota intestinal: disbiosis puede aumentar la permeabilidad intestinal y facilitar la translocación bacteriana.
  • Respuesta antioxidante: equilibrio entre oxidantes y antioxidantes modula el estado inflamatorio.

Alimentos y componentes relacionados con inflamación

A. Azúcares añadidos y carbohidratos refinados

  • Evidencia: dietas con alto índice glucémico y carga glucémica se han asociado a mayores niveles de marcadores inflamatorios en varios estudios.
  • Mecanismo: picos de glucosa e insulina, estrés oxidativo, respuesta de adipocinas.
  • Consideración práctica: reducir bebidas azucaradas y ultraprocesados; preferir carbohidratos complejos y fibra.

B. Grasas saturadas y grasas trans

  • Evidencia: algunas cohortes y ensayos sugieren asociación entre ingesta alta de grasas saturadas y marcadores inflamatorios; grasas trans, especialmente en productos horneados y fritos, se asocian con inflamación sistémica.
  • Mecanismo: activación de receptores Toll-like (TLR) en adipocitos y macrófagos; dislipidemia y estrés oxidativo.
  • Consideración práctica: limitar grasas saturadas y evitar grasas trans; elegir grasas mono- y poliinsaturadas (aceite de oliva, frutos secos, pescado).

C. Ácidos grasos ω-6 frente ω-3

  • Evidencia: el ratio ω-6/ω-3 puede influir en la inflamación; dietas ricas en ω-6 sin compensación de ω-3 podrían favorecer estados proinflamatorios, aunque la evidencia es compleja.
  • Mecanismo: eicosanoides derivados de ω-6 pueden ser proinflamatorios; ω-3 producen resolvinas y protectinas con efectos antiinflamatorios.
  • Consideración práctica: favorecer fuentes de ω-3 (p. ej., pescado graso, semillas de chía, linaza) y mantener un balance razonable entre ω-6 y ω-3.

D. Proteínas procesadas y ultraprocesados

  • Evidencia: consumo elevado de carnes procesadas se ha asociado con marcadores inflamatorios y mayor riesgo de ciertas condiciones crónicas.
  • Mecanismo: compuestos de nitrosación, heterocíclicos aromáticos y otros metabolitos pueden promover inflamación; alto contenido de sodio y aditivos también pueden influir.
  • Consideración práctica: priorizar proteínas de alta calidad (pescado, legumbres, frutos secos, carnes magras) y reducir ultraprocesados.

E. Alcohol

  • Evidencia: consumo moderado puede tener efectos variables; ingesta elevada se asocia a inflamación hepática y sistémica.
  • Mecanismo: estrés oxidativo, endotoxemia a través de la microbiota.
  • Consideración práctica: moderación o abstinencia según contexto individual.

F. Fibra y fitoquímicos

  • Evidencia: dieta rica en fibra y fitoquímicos se asocia con disminución de marcadores inflamatorios; estos compuestos favorecen una microbiota diversa y producción de ácidos grasos de cadena corta (butirato) antiinflamatorios.
  • Consideración práctica: consumo de frutas, verduras, legumbres, granos enteros y alimentos fermentados.

G. Antioxidantes y micronutrientes

  • Evidencia: vitaminas C y E, carotenoides, y minerales como zinc y selenio desempeñan roles en modulación inflamatoria.
  • Consideración práctica: una dieta variada rica en frutas y verduras aporta estos nutrientes.

H. Productos ultraprocesados

  • Evidencia: asociación consistente entre alto consumo de ultraprocesados y marcadores inflamatorios, posiblemente por aditivos, colorantes, grasas añadidas y otros compuestos.
  • Consideración práctica: reducir ultraprocesados y fomentar alimentos mínimamente procesados.

Patrones dietéticos y inflamación

  • Dieta mediterránea: repetidamente asociada con menor inflamación y mejor perfil de marcadores inflamatorios.
  • Dieta DASH (Dietary Approaches to Stop Hypertension): efectos beneficiosos en inflamación y salud cardiovascular.
  • Dieta vegetariana/vegana: resultados mixtos, con beneficios cuando se centra en alimentos enteros; suplementación puede ser necesaria en B12, hierro.
  • Dieta occidental: típicamente asociada a mayor inflamación debido a alto consumo de azúcares añadidos, grasas saturadas y ultraprocesados.
  • Índice y carga glucémica: dietas con menor IG/CG suelen asociarse a menor inflamación en ciertos grupos.

Implicaciones prácticas para la clínica y la salud pública

  • Personalización: considerar edad, sexo, comorbilidades, estado metabólico y microbiota.
  • Enfoque de alimentación global: no centrarse en un solo nutriente; preferir patrones dietéticos que reduzcan inflamación.
  • Educación y apoyo: estrategias de cambio de hábitos, reducción de ultraprocesados, fomento de fibra y pescado rico en ω-3.
  • Monitoreo: uso de marcadores inflamatorios en contextos clínicos específicos cuando sea pertinente (p. ej., CRP en inflamación sistémica).
  • Situaciones especiales: embarazo, lactancia, enfermedades autoinmunes, y condiciones metabólicas requieren consideraciones particulares.

Limitaciones de la evidencia

  • Heterogeneidad entre estudios: diseños, poblaciones, dosis y duración.
  • Asociación vs causalidad: muchos hallazgos son correlacionales.
  • Factores confusores: estilo de vida, actividad física, sueño, estrés.
  • Diferencias individuales: variabilidad en la respuesta inflamatoria a los alimentos.

Conclusiones

  • La inflamación alimentaria es multifactorial; ciertos alimentos y patrones dietéticos pueden modularla.
  • Adoptar un patrón de alimentación equilibrado, rico en fibra, antioxidantes y grasas saludables, mientras se reducen ultraprocesados y azúcares añadidos, puede contribuir a un menor estado inflamatorio.
  • Se requieren enfoques individualizados y más estudios longitudinales y de intervención para establecer recomendaciones más precisas.

Referencias Bibliográficas

  • Calder, P. C., et al. "Inflammation and the Gut." Journal of Nutrition, 2020.
  • Libby, P. "Inflammation in Atherosclerosis." Nature, 2002.
  • Esposito, K., et al. "Diet and Inflammation: A Review." The American Journal of Clinical Nutrition, 2004.
  • Hu, F. B. "Dietary Pattern Analysis and Inflammation." Current Opinion in Lipidology, 2007.
  • Bielik, S. "Ultraprocessed Foods and Health." Lancet Public Health, 2019.
  • Espaillat, R., et al. "Dietary Fiber and Inflammation." Journal of Clinical Investigation, 2020.
  • Simopoulos, A. P. "Omega-6/Omega-3 Ratio and Inflammation." Prostaglandins, Leukotrienes and Essential Fatty Acids, 2010.
  • Estruch, R., et al. "Primary Prevention of Cardiovascular Disease with a Mediterranean Diet." New England Journal of Medicine, 2013.
  • Schwingshackl, L., & Hoffmann, G. "Dietary Patterns and Inflammation." Journal of the American College of Cardiology, 2014.
  • Fardet, A., et al. "Ultraprocessed foods and health outcomes." Current Opinion in Clinical Nutrition & Metabolic Care, 2016.

Derechos de Autor

Todos los derechos de autor reservados, prohibida su reproducción o modificación parcial o total.