¿Qué es el Bruxismo?
Escrito por: CD. Enrique Romero Martín
El bruxismo es un hábito involuntario que consiste en apretar y/o rechinar los dientes, ya sea durante el día o, más comúnmente, durante la noche mientras se duerme. Este trastorno puede generar desgaste dental, dolor en la mandíbula y otros problemas bucales, afectando tanto a menores como a adultos.
Algunas personas no presentan síntomas, mientras que otras pueden experimentar dolores de cabeza, de mandíbula y dentales. En los niños, este trastorno suele mejorar por sí solo.
Los conocidos como guardas oclusales o placas relajantes son un coadyuvante como parte de un tratamiento, pero no la solución definitiva. Muchos casos de bruxismo son leves y pueden no requerir tratamiento; sin embargo, el bruxismo grave puede provocar daños en los dientes, dolor o cansancio en la mandíbula y dolor de cabeza.
Clasificación del Bruxismo
• Por el momento en que se produce: - Bruxismo diurno: Se produce cuando la persona está despierta y consciente de la acción. - Bruxismo nocturno: Ocurre durante el sueño y suele ser el más común.
• Por la forma en que se manifiesta: - Apretamiento: Consiste en ejercer una fuerza constante sobre los dientes. - Rechinamiento: Implica un movimiento lateral de los dientes, como si se estuvieran frotando uno contra otro.
Causas del Bruxismo
• Estrés y ansiedad: Son los desencadenantes más comunes.
• Trastornos del sueño: Apnea del sueño, síndrome de piernas inquietas.
• Desalineación dental: Una mala oclusión puede provocar que los dientes entren en contacto de manera incorrecta.
• Hábitos: Masticar chicle excesivamente, morder objetos duros.
• Medicamentos: Algunos medicamentos pueden contribuir al bruxismo.
• Factores psicosociales: Estrés, estado de ánimo, angustia, nerviosismo.
• Predisposición genética.
• Consumir alcohol, cafeína y fumar son factores importantes a considerar.
• Medicamentos utilizados para tratar la depresión, convulsiones y TDAH pueden aumentar las posibilidades de bruxismo.
Síntomas del Bruxismo
• Dolor facial y de cabeza: Sensación de tensión en los músculos de la mandíbula, mejillas y sienes.
• Dolor de oído: Debido a la tensión en los músculos de la mandíbula.
• Desgaste dental: Los dientes pueden presentar desgaste, fracturas o astillamiento.
• Sensibilidad dental: Al calor, frío o alimentos dulces.
• Dolor de la articulación temporomandibular (ATM).
Tratamiento del Bruxismo
• Cambio de conducta: Descanso y consciencia del problema de rechinar o apretar.
• Control de estrés.
• Tratamiento dental.
• Férula de descarga: Un dispositivo bucal personalizado que protege los dientes y reduce la tensión muscular.
• Terapia física: Ejercicios para relajar los músculos de la mandíbula y mejorar la función de la ATM.
• Manejo de estrés: Técnicas de relajación, meditación, yoga o terapia cognitivo-conductual.
• Medicamentos: Relajantes musculares o medicación para trastornos del sueño.
• Tratamientos restauradores dentales si ya hubo daño en los dientes.
¿Por qué es importante tratar el bruxismo?
Si no se trata, el bruxismo puede llevar a complicaciones a largo plazo, como:
• Pérdida de dientes.
• Dolor crónico.
• Problemas en la ATM.
• Afectación de la calidad de vida.
Es fundamental consultar a un dentista si sospechas que padeces bruxismo. El dentista podrá realizar un diagnóstico preciso y recomendar el tratamiento más adecuado para tu caso.
Recuerda: El bruxismo es una condición tratable. Puedes reducir los síntomas y prevenir complicaciones a largo plazo.
Consejos útiles
• Visita al dentista con regularidad para detectar signos tempranos de bruxismo.
• Prueba actividades relajantes como el yoga o la meditación.
• Evita la cafeína y el alcohol.
• No fumes.
Referencias
- Julio Barrancos M., Operatoria Dental Clínica