INGENIERÍA Y SEGURIDAD, LECCIONES DEL 22 DE ABRIL

22 de abril de 2024 por

Hoy, 22 de abril, marcamos un día oscuro en la historia de Guadalajara. Hace ya varias décadas, un evento trágico sacudió nuestros cimientos y dejó una huella imborrable en nuestra ciudad y en nuestros corazones. Como ingenieros, no podemos dejar de recordar aquel fatídico día desde una perspectiva técnica, pero también desde el profundo respeto a las vidas perdidas y al dolor de los sobrevivientes.

Las explosiones del 22 de abril de 1992, causadas por un escape de gasolina en el sistema de alcantarillado, fueron un recordatorio brutal de la importancia de la planificación urbana, la verificación constante de la infraestructura hidráulica y, sobre todo, la seguridad y de los materiales utilizados en las tuberías. La tragedia no solo cobró vidas, sino que dejó a su paso una devastación que nos obliga a reflexionar y aprender.

Como ingenieros, estamos llamados a ser guardianes de la seguridad y el bienestar de la sociedad. El desastre del 92 nos enseñó que la negligencia en el diseño, construcción y mantenimiento de la infraestructura puede tener consecuencias catastróficas. Las tuberías corroídas, la falta de inspecciones adecuadas y la falta de protocolos de emergencia contribuyeron a la magnitud de la tragedia.

Sin embargo, en medio de la oscuridad, surgió la luz de la solidaridad y la resiliencia. Los ingenieros, ciudadanos y equipos de rescate trabajaron incansablemente para salvar vidas y mitigar el sufrimiento. La reconstrucción del barrio de Analco no solo implicó la restauración de edificios y calles, sino también la reconstrucción del tejido social y la confianza en nuestras capacidades como sociedad.

Desde entonces, se han implementado medidas de seguridad más estrictas y se han mejorado los estándares de construcción y mantenimiento de infraestructura hidráulica. Sin embargo, los sucesos de aquel día nos recuerdan que nunca debemos bajar la guardia. La seguridad en las construcciones, el cuidado con lo que se vierte en el drenaje y la ingeniería responsable deben ser pilares fundamentales en el desarrollo de nuestras ciudades.

En este día de conmemoración, honramos a las 212 víctimas mortales, a los más de 1800 heridos y a sus familias. Recordamos sus vidas y el legado que dejaron. Pero también renovamos nuestro compromiso como ingenieros de trabajar incansablemente para construir un futuro más seguro y resiliente para todos.

Que las lecciones aprendidas del 22 de abril de 1992 nos guíen en nuestro camino hacia un mañana mejor, donde la seguridad y el bienestar de la sociedad sean siempre nuestra prioridad.

Bibliografía

Noé, J. (2009). "Memoria y olvido del desastre urbano en México: el caso de las explosiones en Guadalajara". En: Cuadernos de historia moderna y contemporánea, 16, 107-123.

Durán, J. L. (2016). "Desastres en ciudades: el caso de Guadalajara". En: Revista Técnica de la Facultad de Ingeniería Universidad del Zulia, 39(2), 33-45.

Méndez, R. (2008). "El impacto social y ambiental de las explosiones de Guadalajara". En: Revista Mexicana de Ciencias Sociales, 55(3), 771-785.

Secretaría de Gobernación. (1992). Informe sobre las explosiones del 22 de abril de 1992 en Guadalajara, Jalisco. México: Secretaría de Gobernación.

Gobierno del Estado de Jalisco. (1993). "Informe sobre las causas de las explosiones en la ciudad de Guadalajara el 22 de abril de 1992". En: Boletín Oficial del Estado de Jalisco, 32(4), 12-28.


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